Una luz para cada habitación
Cuando llega el momento de elegir la iluminación para nuestra casa es importante que antes de realizar ninguna compra, tengamos en cuenta algunos factores. Los más importantes son, sin duda, la eficiencia energética y el ahorro de dinero, todo esto es posible siempre y cuando tengamos claro que tipo de bombillas se ajustan mejor a nuestras necesidades.
Vamos a tratar de explicar el funcionamiento de las más utilizadas.
Bombilla incandescente
es la bombilla más común, dentro tiene un filamento de tungsteno, que se ilumina cuando se calienta, el resultado es una luz amarillenta.
es la bombilla más común, dentro tiene un filamento de tungsteno, que se ilumina cuando se calienta, el resultado es una luz amarillenta.
Pero este tipo de bombillas tienen los días contados, la poca eficiencia energética está llevando a su desaparición del mercado y a su sustitución por las de bajo consumo.
Bombilla halógena
es una variante de la incandescente, en la que el vidrio se sustituye por un compuesto de cuarzo, que soporta mucho mejor el calor (lo que permite lámparas de tamaño mucho menor, para potencias altas) y el filamento y los gases se encuentran en equilibrio químico, mejorando el rendimiento del filamento y aumentando su vida útil.
es una variante de la incandescente, en la que el vidrio se sustituye por un compuesto de cuarzo, que soporta mucho mejor el calor (lo que permite lámparas de tamaño mucho menor, para potencias altas) y el filamento y los gases se encuentran en equilibrio químico, mejorando el rendimiento del filamento y aumentando su vida útil.
Los focos halógenos emiten una luz blanca y potente, pero normalmente se concentra en un punto, por lo que se utilizan para iluminar ó destacar objetos como cuadros, esculturas, piezas de artesanía, etc.
En muchas ocasiones las lámparas de pie suelen llevar un potenciómetro para poder regular la intensidad de la luz, ya que uno de los principales inconvenientes de estas bombillas es el calor que generan.
Los fluorescentes
se caracterizan, además de por su forma alargada, por emitir una luz muy blanca. En la actualidad se han convertido en el medio de iluminación de uso más generalizado en comercios, oficinas, sitios públicos, viviendas, etc.
se caracterizan, además de por su forma alargada, por emitir una luz muy blanca. En la actualidad se han convertido en el medio de iluminación de uso más generalizado en comercios, oficinas, sitios públicos, viviendas, etc.
Entre sus ventajas destaca su larga duración, entre ocho y diez veces más que las incandescentes. El principal inconveniente es que tardan un poco en encenderse, y algunas veces producen un incesante parpadeo que acaba siendo muy molesto cuando estamos trabajando.
En el mercado hay lámparas de bajo consumo con casquillo, que pueden sustituir a las tradicionales bombillas. Sin embargo, no siempre son rentables. Si pretendemos conseguir una iluminación más económica, hay que tener en cuenta algunos consejos.
Las bombillas de bajo consumo son más caras. Su eficiencia lumínica es muy superior, con sólo 11 watios iluminan lo mismo que una de incandescencia de 60 watios.
Su vida media útil es muy superior: unas 12.000 horas, frente a poco más de 1.000 h. de una convencional
En el momento de encenderse consumen mucha energía lo que no las hace aptas para estancias donde se utilicen durante breves periodos de tiempo. Apagarlas y encenderlas con frecuencia también reduce su vida útil.
En el momento de encenderse consumen mucha energía lo que no las hace aptas para estancias donde se utilicen durante breves periodos de tiempo. Apagarlas y encenderlas con frecuencia también reduce su vida útil.
¿Qué es un Led ? es un diodo emisor de luz (del inglés Light-Emitting Diode). La luz se produce cuando una corriente eléctrica pasa a través de un material semiconductor del que están hechos los Leds. Esta es la principal diferencia con las bombillas tradicionales que producen luz cuando se calienta un pequeño filamento. Por ello, los leds al no tener filamentos, son mucho más duraderos y fiables que las bombillas frente a posibles golpes, vibraciones, etc. ya que carecen de una resistencia que pueda romperse o quemarse. Además, estas bombillas al no producir calor son ideales para lugares donde deban permanecer mucho rato encendidas, como la cocina y en general en todo el resto de nuestro hogar, gracias a su insuperable rendimiento energético.
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Fuente : Hogar Fotocasa
